El seleccionado femenino de fútbol llegó a la Argentina tras su participación en el Mundial de Francia. En Ezeiza cientos de hinchas las esperaban.
Argentina llegó sin pretensiones y se va con la certeza de que cuenta con la materia prima para convertirse en un equipo de primer nivel: un gol la separó de octavos, pero demostró que es un grupo con referentes, jugadoras de futuro y la cohesión necesaria para llegar lejos.
“Jugar el Mundial ya cumple nuestro objetivo”, declaró a la agencia internacional AFP el presidente de la AFA Claudio “Chiqui” Tapia antes del comienzo del torneo en Francia.
Argentina venía de muy lejos. Dos participaciones mundialistas (2003 y 2007) saldadas con seis derrotas, 33 goles en contra y dos a favor, y un equipo nacional femenino que prácticamente había desaparecido en 2017.