Los empresarios industriales de la UIA plasmaron la necesidad de que todas las fábricas del país puedan tener acceso al programa de Asistencia al Trabajo y la Producción ( ATP) ante la crisis de la parálisis de la actividad, que afecta a los galpones cerrados por obligación como aquellas instalaciones que cuentan con el permiso de excepción para funcionar, pero que vieron un derrumbe en el consumo. Esta situación está planteada por las exclusiones a los beneficios del Estado aun cuando registran pérdidas.
El punto fue uno de los temas que se plantearon en la reunión de Junta Directiva, en donde la entidad del sector privado más representativa del país respaldó al Gobierno en términos de relaciones exteriores, tanto comerciales como económicas. Incluso alineada a las políticas oficiales, en la UIA no dejó de establecerse una necesidad de ampliación para sostener a las empresas y el empleo.
“Se ponderó la ampliación del Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción, y se puso de manifiesto la necesidad de garantizar el acceso a todas las empresas industriales”, señaló un comunicado de prensa de la entidad. Fuentes consultadas por BAE Negocios destacaron que “hay muchas empresas que están funcionando, pero el margen de vida es muy escueto porque no tienen ayuda en medio de una crisis que golpea a todas las fábricas”.
“Las empresas tienen que reemplazar a operarios exceptuados y debe contratar a personal temporario, lo que suma costos. Pero con precios congelados desde hace más de cuatro meses, y sin ayuda de ningún tipo, es difícil que se llegue a la pos pandemia”, confió a este diario un empresario de uno de los sectores exceptuados.
Los representantes regionales y sectoriales que ayer se reunieron en la UIA de manera virtual reiteraron las “dificultades en el acceso al crédito -en particular para el capital de trabajo- y los cheques rechazados fueron las principales preocupaciones mencionadas”. “Además, se brindaron detalles del trabajo que se está realizando desde la UIA en el diseño de una red de información y contactos que permita compartir protocolos sanitarios para la reapertura progresiva de sectores productivos”, destacó el informe de prensa.
En ese contexto, quedó resaltada la ponderación que hicieron sobre la mesa de diálogo social que implementaron con el sindicalismo de la CGT, con la firma de un acta para “sostener la actividad productiva y el empleo en el marco de la pandemia, morigerando el impacto de la emergencia sanitaria en la actividad de las empresas industriales”.
“A tales fines, se establecieron una serie de pautas como el pago del 75% del ingreso neto a los trabajadores que están impedidos de cumplir sus tareas habituales por la paralización de actividades y un límite de 60 días para las suspensiones –que rige desde el 1 de abril inclusive– con la garantía de la continuidad en los puestos de trabajo durante el tiempo en que se haga efectiva la suspensión”, destacó el comunicado.
Fuentes de la entidad afirmaron: “El diálogo social es un activo para un momento como el que estamos atravesando. Empresarios industriales y trabajadores tenemos el mismo objetivo: sostener el empleo y la actividad productiva”.
“Con la salud como prioridad estamos trabajando para articular de manera integral los protocolos sanitarios, la salud de los trabajadores, la evolución de la economía, la situación de las empresas industriales y la protección del empleo formal, destacaron las fuentes consultadas.
Además, sostuvieron que el acuerdo marco “permite tener previsibilidad en tres dimensiones: en los ingresos de los trabajadores, en el sostenimiento del empleo y en la viabilidad de las empresas industriales”.
En ese contexto, hubo un fuerte respaldo de la entidad al Gobierno por las negociaciones con los bonistas por la deuda externa y la tensión con los socios del Mercosur. “La estrategia de negociación es compleja. Debemos ser prudentes y acompañar la estrategia del Gobierno. ¿Por qué? Porque un acuerdo con los acreedores resulta clave para generar un escenario previsibilidad macroecoconómica, promover la inversión privada y crear empleo”, señalaron fuentes industriales.
En torno al Mercosur, la UIA pidió fortalecer el bloque pero “desde una mirada que priorice el empleo regional, potencie la inversión productiva en los países que lo componen y resguarde el mercado común en un contexto global volátil”.
Fuente: BAE Negocios