Los famosos siempre despiertan comentarios, que a veces gustan y otras no. Sus actividades, muchas veces reflejadas por ellos mismos en sus propias redes sociales, son objeto de opinión de sus seguidores y el público en general.
Que lo diga sino Juana Viale, que posteó una imagen tierna de amor hacia su hijo de 11 años, y terminó recibiendo críticas al por mayor porque subió una foto donde ¡estaba manejando!
La actriz quiso dar un mensaje de amor por su vínculo con Silvestre Valenzuela y generó tantas críticas como elogios. Acostumbrada a mantener un perfil bajo, pero siempre criticada por algún motivo, la actriz no pasó desapercibida con una foto que publicó en Instagram.
“Él aprende, entusiasmadísimo a manejar. Yo aprendo, entusiasmadísima a amar. Ser madre es la misión más linda que me tocado sortear en la vida.Gracias! #freesoul #freewoman #madre #naturaleza”, comentó.
Si bien se notaba que estaban en un camino descampado, le llovieron palos. “Pero, digo yo, no ven que es un PELIGRO llevar así a la criatura”; “es al menos criticable, dado que enseñarle a manejar a los 11 años, no es apropiado, además de muy peligroso tanto para el, como para su prójimo”, fueron algunos de los comentarios.
Otro más agresivo la acusó de violar las normas de tránsito y de ser una ‘hippie cheta’. “Aparte Juani es re canchera, ¡lo poco que sabe hablar se ríe de la gente! ¡Como recién riéndose de las normas de tránsito! ¡Estas hippies chetas son así! Pura libertad y espiritualidad, talento cero, ¡la vi en su obra de teatro un desastre! ¡Si no fuera la nieta de Mirtha no labura en ningún lado!”, expresó.
Una ciudadana española puso el ejemplo de las normas de su país. “El mío tiene 12 pero aquí en España te agarran así y te quitan el carnet. Me gustaría enseñarle pero aquí hay autoescuelas obligatorias para sacarte el carnet y a los 18. Soy Argentina, pero aquí tengo que respetar las normas, y a Norma también”, comentó.
Lo cierto es que más allá de que pueda o no constituir un peligro, es un ejemplo poco feliz el de Juana pues puede ser imitado por otras personas que pongan menores al volante y todo puede suceder.