El cuerpo momificado de un hombre fue hallado en una mansión que se vendió en forma reciente en Francia luego de casi tres décadas abandonada.
La propiedad se encuentra en un prestigioso barrio de Paris, a pocos minutos de la residencia oficial del primer ministro francés.
El edificio salió a subasta en enero y fue adquirido por 35,1 millones de euros.
Al encarar las tareas de renovación el propietario contrató a personal del rubro, quien estaban trabajando en un sótano y, bajo unas tablas y escombros, hallaron el cuerpo asesinado a puñaladas, con cierto frado de conservación a partir de la humedad y condiciones del lugar.
Tras la denuncia respectiva, la Policía inició una investigación e identificó a la víctima como Jean-Pierre Renaud, un indigente.
El cuerpo presenta los huesos rotos y heridas de arma blanca. Los investigadores creen que será muy difícil resolver el crimen luego de 30 años.
De acuerdo con fuentes policiales que hablaron con el diario francés Le Monde, el hombre no tenía domicilio fijo y tenía problemas con el alcohol.
“Podemos imaginar una pelea con otra persona que vivía como él y aún no está claro si murió en la mansión o si fue llevado allí. Además, es posible que nunca sepamos quién fue el responsable. Seguramente el asesino ya esté muerto”, señalaron.
“Lo encontraron en un lugar que no había sido visitado ni por el alguacil que había hecho el informe ni por nadie más. Nadie había visitado el sótano”, comentó Bruno Picard, abogado a cargo de la subasta de la casa.
Los hijos del asesinado ya fueron informados sobre el hallazgo del cadáver.
Fuente: Telefe