Un producto clave para la mesa de los argentinos registró fuertes subas en los últimos años con cierto congelamiento en algunas marcas al encontrarse dentro de los Productos Esenciales.
El precio del aceite creció hasta un 530% en las góndolas de los supermercados en casi cuatro años, estadística que preocupó a los especialistas y golpeó con dureza al bosillo argentino.
El dato fue dado a conocer a través de un relevamiento realizado por la Defensa de Usuarios y Consumidores (DEUCO), en el que precisaron que el precio del aceite subió, desde enero de 2016 hasta septiembre de este año, desde un 400 hasta un 530 por ciento de acuerdo a la marca.
De esta manera, el precio del aceite marca Cada Día pasó de 16,72 a 88,50 pesos (430%); marca Legítimo de $17,72 a $88,50 (400%); marca Cañuelas de $19,13 a $114,60 (500%); marca Cocinero de $19,51 a 114,80 (500%); y marca Natura de $19,68 a $124 (530%).
De esta manera, según contó el presidente de DEUCO, Pedro Bussetti, de la lista de cinco marcas de aceites que contempla el estudio, solo hay dos que “están dentro de los Precios Esenciales”, lo cual explicaría el por qué de su valor más bajo, aunque detalló que “no hay ninguna razón” para dichos valores, ya que “es todo pura especulación y poder dominante”, dado a que “las empresas que manejan el aceite son tres”, es decir, “el 90 por ciento” del mercado.
“Lo que nosotros estamos reclamando es que el próximo gobierno aplique las retenciones de todos los productos de exportación que están vinculados a los alimentos, para garantizar que en el mercado interno los productos sean accesibles”, explicó Bussetti, quien agregó que también es necesario que se logre un acuerdo “con las demás empresas” para agregar todas las marcas de aceite a la lista de Precios Esenciales.
Sobre los motivos que conllevaron a estas preocupantes subas de precios, puntualizó que es necesario lo implementado en el año 2008, cuando ” el Gobierno Nacional dispuso la imposición de una retención a las exportaciones de oleaginosas -vegetales de cuya semilla o fruto puede extraerse aceite- del 1,2% sobre el valor FOB de las exportaciones de porotos y harina de soja. Con esa recaudación llegó a un acuerdo con los exportadores y la industria aceitera y se creó un fideicomiso por el cual se fijaban precios regulados para el aceite comestible consumido en el mercado interno y se subsidiaba a todas las empresas productoras de aceite comercializadoras del producto abonando las diferencias correspondientes. Esto permitió que todos los hogares argentinos pudieran adquirir aceite comestible a precios accesibles”.
“El fideicomiso llegó a administrar un monto de más de 1.400 millones de pesos anuales y estaba a cargo de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina, que era la encargada de distribuir los fondos en forma proporcional de acuerdo a las ventas de cada empresa en el mercado interno”, indicó.
No obstante, tras la eliminación a las retenciones en diciembre del 2015, “el fideicomiso quedó sin efecto, al igual que la obligación de aportar el 1,2% de las exportaciones”.
“A partir de esa decisión se dio el visto bueno para debilitar el fideicomiso permitiendo que las exportadoras no giraran el dinero para integrarlo. No se controló el cumplimiento del acuerdo lo que permitió la evolución de los precios, de manera tal que en el programa Precios Cuidados vigente, entre mayo y setiembre de 2016, se eliminaron los precios al público consumidor de los aceites”, analizó el titular de DEUCO.
Bajo esta línea, aclaró que, luego de esta decisión, “en los primeros 8 meses del 2016, ya el aceite había tenido un incremento del 100% de su valor respecto a los precios de 2015”.
“Con el devenir del tiempo y tal como lo demuestran los datos difundidos por nosotros, el incremento del aceite alcanzó el 500% de aumento”, finalizó.
Fuente: Diario Popular