La trabajadora del local de comida rápida se defiende, y le asesta repetidos puñetazos al cliente, que fue detenido acusado de dos cargos de agresión.
En la ciudad de San Petersburgo, Florida, un hombre de 40 años fue detenido por agredir a una empleada del McDonalds porque no había sorbetes de plástico en el mostrador.
Según un comunicado oficial de la policía de San Petersburgo, el incidente se produjo el pasado 31 de diciembre. El cliente se dirigió a los trabajadores del local de comida rápida para protestar por la falta de sorbetes. Entonces, inició una pelea verbal con una empleada que terminó en golpiza y que fue grabada en video por uno de los presentes.
Al inicio de las imágenes se observa al individuo, identificado como Daniel Willis Taylor, discutiendo a gritos con Yasmine James, camarera del McDonalds. La tensión va aumentando y entonces, de imprevisto, agarra a la empleada de la camiseta y la empuja violentamente contra el mostrador, dispuesto a confrontarla.
James se defiende y le asesta repetidos puñetazos en la cara al cliente, que a pesar de los golpes no suelta la camiseta de la empleada, y sigue tratando de sujetarla. Un compañero de la joven intenta separarlos, pero no lo consigue. De fondo, se escucha a un hombre pedirle a Daniel Willis que suelte a la chica (“Let her go”).
“Quiero que la despidan ahora mismo” exclamó Willis Taylor cuando los empleados consiguieron poner fin a la pelea.
Tras lo ocurrido, la empleada continúa gritando y lucha por zafarse de los brazos de sus compañeros, nerviosa. Le responde al cliente que él inició la pelea, y que irá a la cárcel.
De acuerdo a la publicación del departamento de policía local, cuando el gerente solicitó al individuo abandonar el restaurante, este continuó gritando a los empleados, e incluso, propinó una patada en el estómago a una trabajadora que se encontraba cerca de la salida. Después de observar la grabación, los agentes procedieron al arresto del hombre de 40 años y le acusaron de dos cargos de agresión. Por su parte, James fue suspendida en el trabajo.
La autora de las imágenes, Brenda Biandudi, contó a BuzzFeed News que la pelea comenzó por la falta de sorbetes en el mueble donde se ubican las servilletas. Un procedimiento rutinario en este tipo de establecimientos que pretende acogerse a la normativa de la ciudad, que exige que solo se entreguen estos plásticos a aquellos clientes que lo requieran.
Se trata de una iniciativa que busca acostumbrar a los consumidores a beber el refresco sin sorbete, dado que en el 2020 entrará en vigor en la zona una legislación que prohibirá definitivamente su uso.